JUSTIFICACIÓN DEL TÍTULO
En un mundo globalizado, de relaciones complejas y en el que todos los parámetros (económicos, jurídicos, sociales y culturales) son relevantes en la toma de decisiones, se hace necesario formar profesionales con los conocimientos, competencias y habilidades necesarios para entender la complicada realidad globalizada y proporcionar una imprescindible visión de conjunto que permita la detección de posibles problemas, el análisis del contexto en el que se producen y la selección de las estrategias y actuaciones más convenientes en los distintos ámbitos, tanto del sector público como del privado. De ahí la necesidad de ofertar unos estudios universitarios de Grado, con carácter interdisciplinar y plurilingüe, cuyo objetivo fundamental sea formar a profesionales capaces de comprender y analizar, tanto desde una perspectiva global y trasnacional, como desde el punto de vista de sectores o regiones específicas, las relaciones internacionales, de manera que los egresados estén en condiciones de poner al servicio de las más altas instituciones y organismos públicos y privados (Administración civil del Estado, cuerpo diplomático, órganos de la Unión Europea, servicios de inteligencia, consultorías y asesorías, centros de investigación, ONG, partidos políticos, multinacionales, etc.) sus conocimientos, su experiencia, y su capacidad de análisis y de decisión.
Las titulaciones en Estudios Internacionales –bajo diferentes denominaciones, dependiendo de las instituciones que las imparten– combinan, como ningún otro estudio de Grado, el necesario vínculo entre el pasado y el presente, en pro de una formación universitaria consolidada que, sin embargo, no pierda de vista las notas esenciales que deben presidir hoy en día todo Grado, cuales son la incuestionable actualidad del mismo y su incontestable utilidad práctica. Pero, si bien las relaciones internacionales –entendidas en sentido amplio, como conjunto de relaciones políticas, sociales y comerciales, entre pueblos o Estados– son algo tan antiguo como la propia Humanidad, su origen como disciplina académica es relativamente reciente. Éste se sitúa a principios del siglo XX, tras la primera Guerra Mundial, ante la necesidad de determinar y comprender los motivos que habían conducido a ese conflicto, y ante la urgencia de buscar los medios e instrumentos que sirvieran para prevenir e impedir que en el futuro se reprodujeran fenómenos de similar naturaleza y entidad. Dentro de este contexto, en el año 1919, se imparte por vez primera un curso bajo esa denominación, en una institución británica de educación superior, la Universidad de Aberystwyth (antes Universidad de Gales), a la que siguieron otros centros de estudios universitarios como la London School of Economics o las Universidades de Ginebra y Oxford, sin olvidar su también rápida expansión por otras Universidades norteamericanas.
No obstante, a partir de la segunda mitad del s. XX dichos estudios universitarios experimentan un notable desarrollo al dotárseles de un aparato conceptual propio y ampliar su ámbito y objeto de análisis, precisamente como consecuencia del segundo fenómeno bélico mundial, y de otros factores como la evolución de las relaciones entre Estados, la aparición de numerosas organizaciones internacionales y/o regionales para la gestión de asuntos de interés común, o la irrupción de nuevos operadores y agentes políticos y económicos en el nuevo escenario global. Todos estos elementos evidencian un incremento exponencial en la complejidad de las relaciones internacionales y, por ello, la necesidad de formar graduados con un perfil internacional sólido, de modo que puedan hacer frente a los nuevos retos de un mundo globalizado que, sin embargo, ha de coexistir también, con ámbitos regionales perfectamente delimitados.
Para lograr ese objetivo, los alumnos recibirán una formación completa en los distintos ámbitos que abarcan las relaciones internacionales: se les capacitará para entender cómo funciona el sistema internacional en toda su extensión (tanto desde una perspectiva global, como desde la más detallada perspectiva regional); se les enseñará a desgranar el complejo entramado de aspectos que subyace en cada uno de los grandes problemas y debates del ámbito político internacional; y, en definitiva, se les dotará de las competencias fundamentales necesarios para una correcta aproximación al estudio y análisis de las relaciones internacionales, con el fin de interpretar y valorar los acontecimientos políticos, económicos y jurídicos que se desarrollan en el mundo actual. Todo ello desde una visión de carácter multidisciplinar, que se nutre de materias relacionadas con el periodismo y la comunicación, la sociología, la filosofía, la diplomacia, la economía y finanzas internacionales, el derecho, la historia o la política, por poner algunos de los más destacados. Y ello desde una perspectiva plurilingüe, lo que permitirá al alumno adquirir competencias relativas a las lenguas de dos importante regiones estratégicas actuales: el árabe y el chino. Esta última apuesta conforma además un elemento distintivo en la oferta de estudios de Grado planteada.
PERFIL DE INGRESO Y REQUISITOS PREVIOS
El perfil de ingreso recomendado del Grado en Estudios Internacionales es el de aquellos estudiantes que, con independencia de la orientación de sus estudios previos, quieran desarrollar competencias instrumentales, personales e intelectuales que le permitan desempeñar profesiones que se desarrollan en el ámbito internacional tanto desde una perspectiva pública como privada-empresarial. En este sentido el alumnado deberá estar interesado en conocer el contexto internacional en el que se desarrollan los distintos operadores sociales, así como las relaciones políticas entre los Estados, la coyuntura internacional desde una perspectiva histórica, económica, social y jurídica y el desarrollo empresarial en un contexto internacional. Éstas podrían ser algunas de las áreas de interés de los futuros estudiantes.
Quienes cursen el Grado en Estudios Internacionales han de poseer o desarrollar capacidad de estudio y de trabajo, así como capacidad de análisis orientada al estudio de las relaciones internacionales en cada uno de sus ámbitos. En este sentido el conocimiento de idiomas ha de ser un elemento esencial de carácter instrumental para poder desarrollar todas las capacidades al máximo.
El acceso a los títulos oficiales de grado ofertados por la Universidad de Castilla-La Mancha requerirá estar en posesión del título de bachiller o equivalente y la superación de la prueba a que se refiere el art. 42 de la Ley Orgánica 6/2001, de Universidades, modificada por la Ley 4/2007, de 12 de abril, sin perjuicio de los demás mecanismos de acceso previstos por la normativa vigente (art. 14 RD 1393/2007). En concreto, la prueba referida está desarrollada por el RD 412/2014 de 6 de junio, por el que se establece la normativa básica de los procedimientos de admisión a las enseñanzas universitarias oficiales de Grado.
También se podrá utilizar cualquiera de las siguientes vías para acceder a estos estudios:
Título de Ciclo Formativo de Graduado Superior o equivalente relacionados por sus diseños curriculares con los contenidos formativos de la titulación
- Titulados universitarios
- Pruebas de acceso para los mayores de 25 años
- Acceso mediante acreditación de experiencia laboral o profesional.
- Pruebas de acceso para mayores de 45 años
- Titulaciones equivalentes
Si el alumno tuviera más de una vía de acceso podrá hacer uso simultáneamente de todas ellas para ingresar en estos estudios en el momento de formalizar su preinscripción.
Con carácter general por parte de la Universidad de Castilla-La Mancha se procederá a poner a disposición de nuestros potenciales alumnos toda la información necesaria para que el alumno pueda realizar la elección de la carrera con los mayores elementos de juicio posibles.
REQUISITOS PREVIOS
Para esta titulación no hay establecidos criterios especiales de acceso distintos de los derivados de la limitación de plazas de nuevo ingreso y de los establecidos por la legislación vigente de acceso a los estudios universitarios.